Increíble que un diputado de alta espuela y trayectoria
política como Jorge Mesa, salga a
descalificar con lenguaje vulgar, propio de personas incultas y groseras, las
iniciativas del gobernador Sergio Fajardo de colaborar con el desarrollo de sus
departamentos vecinos.
No solo queda muy mal parado ante la opinión pública el
diputado Mesa, sino toda la Asamblea Departamental que sigue de capa caída ante
la opinión pública. La imagen que proyecta frente a estas declaraciones, fuera
de tono y sin argumentos no menoscaban únicamente la imagen y el prestigio de
un personaje, sino de todos los 26 diputados que conforman esta corporación
política.
Está claro que Antioquia como ente administrativo no puede
invertir recursos en otros departamentos porque a un gobernador le pareció,
pero también es cierto que mediante convenios y figuras autorizadas por la ley,
es posible realizar inversiones donde las ventajas y las ganancias para ambas
regiones sean viables. EPM es un ejemplo de ello.
Flaco favor le hizo Jorge Mesa a la asamblea y sus
compañeros de debate, porque muchos diputados –acostumbrados a chantajear su
apoyo al gobernador de turno a cambio de puestos o favores políticos- la están
viendo negra con Fajardo, que no quiere aflojar un centímetro en esta
coyuntura. Mesa Le dio papaya al
gobernador que bien puede aprovechar esta circunstancia a nivel político, para
demostrar que tiene razón y reforzar sus argumentos sobre las pésimas, groseras
y chantajistas costumbres de los politiqueros.
Lo mínimo que puede hacer Rodrigo Mesa es ofrecer disculpas
por su salida en falso, de lo contrario, lo deberá hacer la Mesa Directiva.
Punto para Sergio Fajardo.
____________________________
“Sembremos País” nuevo programa de televisión de Andrés Guerra
El diputado Andrés Guerra Hoyos
lanzó este lunes en la ciudad su proyecto de televisión denominado “Sembremos
País”, una forma diferente de hacer periodismo que aborda diferentes temas enmarcados
dentro de lo cotidiano y donde sus protagonistas son en general, los personajes
de la comunidad que tienen algo bueno o positivo para contar.
“Sembremos País” se estará
emitiendo todos los domingos a las seis de la tarde por el canal Cosmovisión.
Diputado Andrés Guerra, ¿cuál es la idea con este programa, cuál es su
alcance y objetivo?
-La idea es a largo plazo, es
plasmar algo que está haciendo falta en política, que es llevar a la política los cinco sentidos, a lo
simple, a la cotidianidad, esa fue nuestra campaña y no podemos ser tan
incoherentes con nuestros conceptos de vida y luego obtener una simple curul a
la asamblea, empezar a cambiar esa forma y ese concepto de vida, es simplemente
plasmar una forma de vida en un programa y en un proyecto político que esta
amalgamado y que su génesis es sembremos país.
¿Cree usted como diputado cree que se pueda mejorar nuestra televisión
regional?
-Yo invitaré a hacer un estudio,
a que hagamos una introspección entre
los comunicadores, el mismo gobierno, las directivas de Teleantioquia y Telemedellín
para ver qué resultados podemos sacar de un foro abierto sobre la televisión
regional, a pesar de que ha tenido unos puntos muy altos porque hay que decirlo,
Teleantioquia hoy es una marca del departamento, Telemedellín va caminando
hacia esa misma marca en la ciudad, pero
creo que podemos dinamizar y reinventar la televisión y hablo no como diputado
si no como comunicador social que soy.
¿Cuál es su invitación para que los televidentes conozcan esta nueva
propuesta de televisión con el programa “Sembremos País”?
-Que me den la inmensa
oportunidad de estar en el canal cosmovisión a las seis de la tarde los
domingos, que me den la oportunidad de entrar a sus hogares y que conozcan la
otra cara de Andrés Guerra y que
conozcan la problemática de Antioquia, sus necesidades y dificultades y
lo que estamos buscando es noticia positiva, noticia regular que sea un
equilibrio de lo que está pasando en la región.
¿Y los que tengan algo para contar a dónde se pueden comunicar o
dirigir?
-Claro, es fundamental, nosotros vamos a recorrer todo
Antioquia y que nos reciban en las regiones y nos cuenten las historias, en la
página www.sembremospais.com o en la
oficina 402 de la Asamblea Departamental.
________________________________________________________________________
Una metida
de patas
La reciente posesión del nuevo secretario de Seguridad de Medellín,
Eduardo Rojas León, fue toda una metida de patas por donde se le mire, pero el
gran peso de la responsabilidad le cabe a su equipo de comunicaciones, por
dejar posesionar un funcionario de primera línea, sin la asesoría necesaria
para entrenarlo en que puede y que no puede decir a los medios de comunicación.
Su primera actividad debería ser la de
visitar al barrio la Sierra, que queda en la comuna nororiental, para que despierte.
Porque afirmar que en Medellín no existen las fronteras invisibles
o los enfrentamientos entre los combos, es una ingenuidad imperdonable, porque
hasta los niños de cualquier barrio popular de Medellín ya juegan a eso. Para esos
pequeños su primer gran sueño es poseer un arma de verdad.
Los cien días y una semana del gobierno del alcalde Aníbal Gaviria
se enreda con estos funcionarios de los cuales nadie duda de su preparación,
pero la verdad es que su perfil está muy claro dentro de la tecnología y los
sistemas informáticos, pero en seguridad, ese solo es uno de los problemas, no
el más crucial. Esperemos que sepan trabajar en equipo el secretario de
Gobierno actual, -que ya está de por sí molesto porque lo deja sin funciones importantes-
y el recién nombrado en la Secretaría de Seguridad.
Y con relación a las cifras que manejará nuestro nuevo secretario,
a decir verdad no importa tanto discutir si en la ciudad existen cinco mil,
cuatro mil o quinientos combos, bandas o sicarios, podría ser una sola banda,
pero con la capacidad de poner en jaque a toda una ciudad, como lo fue en su
momento la tenebrosa banda de la Terraza.
El problema es estructural, donde un alcalde siente la impotencia
de no poder controlar este cáncer sin la ayuda de un equipo, fuerte, moderno y
eficiente, donde estén comprometidas todas las fuerzas sociales, incluida le
Iglesia que sigue tan calladita frente a estos problemas. Y aquí le cabe buena
parte de la responsabilidad a la policía, que nadie niega hasta donde ha
llegado su ineficiencia. Los mejores amigos de la policía en los barrios
populares, son los integrantes de estos combos.
El sistema judicial, un aliado de primera línea para combatir este
flagelo, tampoco es operativo a pesar del famoso estatuto de seguridad ciudadana
promovido el año pasado por el propio presidente Santos. Los atracadores
callejeros, los viciosos, los violadores, los que cargan armas son liberados a
los pocos días porque el sistema no funciona (además las cárceles están a
reventar) y los unos le echan la culpa a los otros, mientras los delincuentes
se siguen burlando de la sociedad.
Nuestra clase dirigente, nuestros famosos cacaos paisas que en
épocas anteriores mostraban un verdadero liderazgo social y que por esta época
salen a mostrar sus brillantes cifras de utilidades en sus empresas, siguen
insensibles a esta problemática, y están partidos en dos grandes bloques,
colocando y respaldando candidatos presidenciales, alcaldes y gobernadores,
pero solo para provecho propio, que se resume en una sola palabrita, la misma
que casi quiebra a Bogotá: los contratos.
Por el momento no hay un verdadero líder con el poder suficiente
para aglutinar la sociedad en un solo objetivo: la seguridad. Todos están
demasiado ocupados en los negocios, incluyendo aquellos que alimentan y
estimulan la ilegalidad.